Por Silvina Silva

Que minúsculos y prepotentes solemos tornarnos los seres humanos, ridículos y quejosos por el clima agobiante, en una ciudad donde explotan la energía, los aires acondicionados, no falta el agua potable, entramos en pánico si se cae Internet y encima nos damos el lujo de contaminar el aire, el agua, la tierra y además arrancar árboles, la comodidad extrema nos achata por completo el instinto de supervivencia, el confort que damos por sentado nos hace insatisfechos, pensaba en esos lugares inhóspitos donde no hay luz eléctrica, ni agua potable, ni tienen piletas inmensas donde refrescarse, pensaba en la gente que no tiene techo, que vive en la calle o no tiene baño, desesperamos ante un corte de luz, o nos entra la histeria si cortan el agua, sin embargo no dudamos en baldear veredas, renovar el agua de la pile y malgastar el agua de mil formas, damos por sentado que llegando a casa nos duchamos o tomamos algo bien frío de la heladera, muchas mujeres preocupadas por la panza, los rollos ,las estrías y el color de la bikini, mientras otras ni siquiera tienen canilla para sacar agua, cuantas realidades paralelas, la comodidad nos vuelve indolentes, animales de costumbre y totalmente dependientes, hay lugares donde carecen de todo y viven sin tanta paranoia, y nosotros acá llenos de todos asfixiados como pollos y quejándonos de todo, ¿nos pusimos a pensar si en un día como hoy, no hubiésemos tenido ni una gota de agua, ni electricidad, ni un techo, ni una sombra donde resguardarnos??,el clima extremo agobia y con todo lo que tenemos es difícil de sobrellevar, y la gente que no tiene nada??? Que vive bajo las inclemencias del tiempo, sin comida, con sed, sin producto para higiene??? Mejor agradezcamos felices lo afortunados que somos, hay muchos que soportan todo…sin tener nada…