El 2021 se está yendo, apurado por las circunstancias vividas por todos nosotros: la pandemia, que nos sigue castigando, a pesar de la ola vacunatoria que no cesa, y nos coloca en mejores posiciones para enfrentarla. Es una marca de la cual no nos podemos desprender, aunque queramos, el barbijo ha llegado para quedarse un largo tiempo haciéndonos cambiar nuestras costumbres. Hasta las relaciones sociales cambiaron, se redujeron sensiblemente los besos, ahora un toque de puños es el saludo universal, tal como hacían los romanos para saludarse, retrocedimos en el tiempo. Cuando creíamos que el virus se había alejado, apareció un primo sudafricano el Omicron, y nos complica la vida. Algo para rescatar en la ciudad es la gran cantidad de vacunados que tenemos, el centro anduvo bien, eso permitió que seamos la ciudad de los alrededores con mas eventos masivos.
En otro orden de cosas este año también tuvo elecciones, y por supuesto hubo sorpresas. En Capitán Sarmiento, fue histórico que un partido se quedara con los seis concejales, porque los demás no llegaron al piso
requerido. Juntos logró, gracias a la gestión del intendente imponerse a Todos por una distancia sideral, mientras en la Provincia las diferencias no fueron tantas. Otra vez en contramano, mientras en Nación y Provincia gobierna un partido, aquí lo hace otro que es de la oposición. En fin, son las reglas de juego que impone la democracia. Para desgracia la brecha se sigue profundizando en lugar de achicarse, y la culpa es exclusivamente de los políticos, todos en general, porque siguen con sus chicanas y ninguno tiene las manos limpias, porque la corrupción está en todos lados, se enquistó en nuestra sociedad, ahora hasta la persona mas insignificante, esté en el lugar que esté, te coimea, y para que esto desaparezca hará falta muchas generaciones, porque el cambio es en la educación, y como sabemos la misma hace rato que está en decadencia. No hay parámetros que la frene, cada vez mas seguido vemos como el tejido social se va deteriorando, y los sucesivos gobiernos no hacen nada para pararlo. ¿Será por conveniencia política? Quien lo sabe. Las enseñanzas de nuestros abuelos ya no sirven, ahora lo mediático es la meta. ¿Si hay esperanza?, y si, eso es lo último que se pierde. Estas fueron a grandes rasgos los sucesos que marcaron nuestro pueblo, ahora hay que esperar que nos depara el año 2022. Desde nuestro lugar vamos a seguir como ese tábano que te mantiene despierto, para que

pienses, por eso te daremos material para que razones. Siempre fue la idea original de este semanario, publicar noticias para que reflexiones, no importa las ideas políticas que tengas, lo importante es tirar siempre para
adelante, pensando en el bienestar general de todos los ciudadanos. Remarcamos nuestro compromiso social para mantener informado a nuestros lectores. Esperando de ellos que nos acompañen en el futuro como
lo han hecho durante estos años. La Navidad que está por llegar pondrá su granito de arena para hacer que los miembros de todas las familias se unan en un festejo cristiano con mucho amor. ¡Feliz Navidad!