Por esto del auge de las aromáticas y de la huerta en casa, estuvimos dialogando con Melina Lanfranconi, propietaria del Vivero Santa Rosa, un clásico de nuestra ciudad, que nos dá algunos consejitos.

E.A.: ¿Cuánto tiempo hace que existe el vivero?

M.L.: Yo tengo 34 años y el vivero hace 35 años que está en funcionamiento, lo empezó mi mamá, después con las vueltas de la vida fue para arriba, para abajo, y yo estaba en Capital Federal, me vine aquí y  hace 4 años que estoy al frente. Empecé tomando primero la decisión de acomodarlo y ahora estoy a full.

E.A.: ¿Cómo fue la evolución, que se pide más actualmente?

M.L.: Hoy la gente está mas concientizada en todo lo que es plantas, como todo son etapas; me acuerdo cuando era chiquita el vivero era un boom, todo el mundo venía, luego tuvo sus bajas, porque se instalaron otros comercios como las regalerías, que tuvieron su auge. Ahora la gente hace sus huertas en la casa, cultiva más orgánico, buscan más semillas.

E.A.: Una persona que quiere tener un cajón de aromáticas, ¿Qué necesita?

M.L.: Primero tener una buena tierra, y sobre todo la orientación, tiene que tener unas buenas horas de sol, que no tenga tanta sombra, un frío normal, porque las aromáticas en sí son plantas que duran todo el año, hablamos de romero, orégano, menta, ciboulette.

E.A. ¿Y para la huerta?

M.L.: Después tenés lo que es huerta, acá depende de la etapa del año. En marzo – abril podes sembrar todo tipo de aromáticas, ahora es tiempo de espinaca, cebolla de verdeo, todo lo que es más duro, algunas variedades de lechuga, si bien todavía estas a tiempo de hacer alguna mantecosa o la crespa, después tenés que poner la gallega que el frio no la perjudica, también espinaca, rúcula. Todo esto lleva 20 días para tener algo para cosechar, dependiendo de que tenga una buena tierra, buen mantenimiento, riego, porque sino todo se atrasa.

E.A.: ¿Y si tenemos alguna plaga?

M.L.: Hoy está muy impuesto el tema orgánico, antes no, de hecho cuando empecé había traído toda la línea orgánica de insecticidas, se vencieron todos porque no se vendieron.  La gente no estaba acostumbrada con esos productos, vos lo ofrecías y decía “dame el de siempre…”. Hoy en día vemos que la gente está más informada.

E.A.: ¿Existen remedio caseros?

M.L.: Si, hay gente que pone jabón blanco, el agua de ajo, obviamente lleva más tiempo curar que con productos; la sal para los caracoles, el arroz para las hormigas, tenés que estar siempre preocupado porque el proceso es muy lento para combatir plagas.

E.A.: ¿Y en frutales?

M.L.: Tenés cítricos que tenemos todo el año, hay que cuidarlos de las heladas, tienen que tener sol, y después en la época de invierno traemos durazno, ciruela, pelón, damasco, higueras, kiwi, generalmente las traemos por pedido, en este último caso, el del kiwi,  hay que tener una planta macho y otra hembra, cada un macho son siete hembras.

E.A.: ¿Que cultivo te están pidiendo últimamente?

M.L.: Bueno, fue el año de la pandemia…En el rubro semillas de huerta fue un boom, fue terrible la cantidad de venta que tuvimos con respecto a otros años, puede ser porque están los chicos en casa, y había que buscar con que llenar el tiempo, y el entretenimiento de hacer la quinta, de mover la tierra, regar, estar atentos por si nació o no nació, crea expectiva y entretiene.

E.A.: ¿En flores?

M.L.: La suculenta desde hace años lidera el mercado.

E.A.:¿Lo suyo es sólo experiencia?

M.L.: Todo experiencia, yo me crié aquí dentro del vivero. Hoy contamos con toda la parte de florería que también me ocupa mucho tiempo, cada vez mas se regalan flores, y agradecemos a la gente porque gracias a ellos podemos crecer día a día, que nos acompaña, que nos enseña y que está siempre con nosotros.