A raíz de una moción presentada en el Facebook por el periodista Juan Carlos Retucci donde preguntaba a la gente que opinaba sobre el proyecto del intendente Iguacel de denominar al camino de circunvalación Dr. Luis Graziosi, en homenaje al facultativo recientemente fallecido, como nunca aparecieron muchísimas opiniones, las cuales en su mayoría cuestionaron firmemente la idea del ejecutivo local, generando un sinnúmero de mensajes, algunos con fundamento y otros simplemente criticando la decisión. Colocarle nombre a las calles y avenidas de la ciudad también es una gran ayuda para que sus habitantes recuerden lugares y sepan la dirección para poder llegar a ellos.  Sin embargo, el procedimiento que implica el nombramiento de estas zonas es el sistema pedagógico para llevarlo a cabo. Es por ello que se trata de un proceso que conlleva un gran compromiso para poder lograr una práctica de consentimiento plena. Se trata de un proceso que debe estar registrado, completamente y de forma correcta, ante las leyes de la nación, para que posteriormente al hacerse el cambio se puedan reasignar los nombres en los registros civiles y los mapas. Téngase en cuenta que en este caso el camino que actualmente figura con el nombre de circunvalación en todos los mapas argentinos y de la ciudad, cambiarlo por el nombre del recordado médico es una tarea importante, por la repercusión que ello indica. La designación del nombre -si bien la hace el intendente- debería tener en cuenta lo que opina el pueblo en general, y no solo un sector, en este caso el gobierno municipal. Es obvio que por tener mayoría absoluta en el HCD el proyecto se aprobará inmediatamente, en caso de presentarlo. Pero Iguacel -como representante del pueblo- debería considerar la expresión que surge del mismo. Siempre que se proponga el nombre de alguna persona para denominar una calle, aparecerán opiniones encontradas. Es lógico porque la conducta, la forma debida en la sociedad no siempre es ejemplar, todos somos seres humanos y tenemos aciertos y errores, y la gente es la receptora de dichas acciones. Por lo tanto, habrá un sector que apoyará y otro que no. Por eso es importante conocer que opina la mayoría. Este sistema no es de nuestro agrado, porque las personas generan controversias, principalmente por su ideología política, consideramos que tal vez es mejor designar las calles con nombres de animales, plantas -como en Cariló, y algunos municipios de la costa, o números como en la ciudad de La Plata, que no generan ningún tipo de controversia y además es muy agradable. Lástima que nosotros adoptamos otro sistema, sino sería hermoso denominar a nuestras calles con nombres de flores, o animales de la zona, sería mas ameno para todos los habitantes de la ciudad. Mientras tanto seguirá la polémica en las redes.