NADIE ES PROFETA EN SU TIERRA
La administración de Iguacel planteó numerosos temas para sacar a Capitán Sarmiento del letargo a la que la sometió la gestión Ostoich, y en cuatro años hizo bastante si tenemos en cuenta que la gobernación le era esquiva. En esta nueva era, llamémosle Fernandista, parece que fuera una prolongación de lo vivido anteriormente, pero en los pocos días de gobierno municipal observamos algunos temas que se salieron del carril. Primeramente mencionar que desde el municipio se produjo una serie de nombramientos de personas que tal vez sean cuestionadas, un poco por no ser de la ciudad. En la secretaria de Cultura, Turismo y Deportes nos sorprendió que nombraran a una persona no tan conocida por los sarmientenses y mas en los tres temas que se ocupa. Estimamos que hay dentro de quienes trabajaron con Iguacel personas capaces -en cultura específicamente- que hicieron mucho mérito y son nacidos en el pueblo, no queremos hacer nombres porque seríamos injustos pero la sociedad local los conoce. Lo mismo en deportes y también en turismo. Solo basta con mirar los cuatro años que pasaron, y verán allí la enorme cantidad de candidatos que hay. La actual funcionaria empezó podando la secretaría y cerrando una serie de talleres porque según su parecer no hay fondos para bancarlos. Tenemos entendido que la mayoría de los profesores cobraban nada y los lugares en los que se dictaban eran municipales, entonces la pregunta del millón: ¿Qué gastos ocasionaban? La respuesta es obvia: Ninguno. Salvo energía eléctrica en algunos casos. Tal vez haya sido una decisión un poco apresurada, todavía se está a tiempo de corregir si es que hubo algún error, para seguir con el lema de ser una ciudad de Cultura, Turismo y Deporte.