POBRES JUBILADOS POBRES

Debido a la gran cantidad de personas estafadas vía internet se hace necesario hablar de este tema. Es que ya se ha convertido en algo diario que por distintas vías se estafe a gente de la ciudad. La mayoría de ellas son jubilados o gente mayor, que son los mas vulnerables por su desconocimiento de la tecnología. Por lo general utilizan como anzuelo empresas de comunicación o de servicios, y comienzan diciendo que se le otorgará un descuento por  pertenecer a la clase pasiva. Es allí donde cae la víctima pensando que su interlocutor le brindará ese ansiado descuento. Proporciona datos vitales de su cuenta bancaria y la estafa se consuma en minutos porque el estafador aprovecha y les vacía la cuenta, o pide un crédito bancario que se convertirá en un peso pesado para la persona. Es que también la realidad no ayuda. La situación de todos es paupérrima, el gobierno ajusta donde no debe, clase media y sobre todo jubilados, que reciben un emolumento miserable y deben hacer malabares para subsistir, por eso cuando alguien les ofrece un descuento de cualquier clase, enseguida cae en la trampa. Del ajuste en la “casta” que se prometió “naranja”. A eso debemos agregarle que justamente los jubilados son personas mayores que difícilmente conocen respecto de la nueva tecnología, hay cientos de celulares que tienen múltiples funciones, de las cuales poco conocen. Ni que hablar del manejo de cuentas bancarias por la red. Esto permite que falsos empleados de empresas conocidas aparezcan ofreciendo descuentos que después se traducen en un vaciamiento de cuentas bancarias. Edén, Naturygas, compras realizadas por internet, y hasta el mismo banco que opera en la ciudad son las empresas elegidas por los estafadores, cuidado con suministrar datos a quienes llaman en su nombre u ofrecen descuentos. Debemos alertar a nuestros abuelos porque esto que contamos se está repitiendo mucho en la ciudad. Mientras tanto las autoridades que deberían ocuparse de que esto no suceda están mirando para otro lado, no quieren trabajar, no quieren investigar, todo queda en una denuncia en la comisaria y todo se olvida. También el banco donde opera la persona estafada debería ser mas directo y fijarse en las operaciones que en el mismo se hacen, y en especial con las personas mas vulnerables. Pongamos un granito de arena todos los responsables y lograremos desterrar esta conducta en toda la ciudad.