Hicimos mención de una noticia que nos llena de orgullo en la vecina localidad de Pehuajó se lograron recuperar 20 toneladas de residuos, convirtiendo a esa ciudad en la primera de Provincia en tratamiento de la basura. Ahora con este botón de muestra, ¿qué podemos decir de nuestro distrito que tiene una planta de procesamiento de residuos sólidos urbanos desde hace mas de dos años? Capitán Sarmiento es mucho más pequeño que Pehuajó por ende genera menos residuos, más fácil de procesar, menos problemas, pero no, aquí parece que en manos del gran gestionador todo es más difícil.  Aquí a pesar de tener la planta de reciclado, los residuos domiciliarios siguen sin clasificarse, algo fundamental, también los recolectores de basura no tienen bien definida su labor dentro del sistema, no se sabe cuando pasan, y que tipo de residuos hay que sacar. Otro delirio es la instalación de volquetes en esquinas de la ciudad, de distintos tipos. Ahora la pregunta es ¿Cómo se vacían estos volquetes? Porque hace falta un camión especial para cargarlo y vaciarlo, y aquí eso no existe, apenas si tenemos camiones recolectores (dos) hechos pedazos. Suponemos –no lo hemos visto- que la recolección se hace manualmente. Estamos a años luz de Pehuajó y tenemos las mismas herramientas. El ejecutivo está haciendo las cosas mal, muy mal. Pero la culpa no es del chancho, también cabe gran responsabilidad a los integrantes del Honorable Concejo Deliberante de nuestra ciudad que deben controlar la gestión que viene desarrollando Ostoich, pero a la luz de lo que vemos la ausencia es total. Ahora la falta de control es porque el intendente no les permite acceder a los papeles o es porque son incapaces en la función que deben desarrollar. Cuando eran minoría los ediles eran más trabajadores, se preocupaban más, luchaban más, pero ahora que son mayoría perdieron capacidad de control, o no saben desempeñarse o realmente son incapaces. No es posible que en una sesión el intendente solicite autorización para contratar un crédito por compras de maquinarias, y no pregunten qué clase de maquinarias va a adquirir, después vienen las sorpresas porque Ostoich compra cualquier maquinaria, como ser la que pinta las sendas peatonales o demarca rutas. ¿Qué rutas o caminos tienen que demarcar?  Dirán el camino circunvalación, muy bien, una vez realizado el trabajo, ¿cuando se hará nuevamente? Pasarán varios años, porque este trabajo dura bastante, y la máquina pasará al recuerdo arrumbada en un galpón. Hubiera sido mejor contratar una empresa de las tantas que existen, vienen realizan el trabajo y se van, y su costo será diez veces menor. Una verdadera ganga. Este argumento que hacemos ¿no lo pudieron prever los ediles cuando pidió la autorización? Esto nos recuerda cuando Ostoich pidió autorización para hacer el monumento a la bandera bonaerense y no les dijo el lugar. Después a la luz de los hechos los Concejales se rasgaron las vestiduras por lo que habían aprobado, pero ya era tarde. Volviendo a la labor desplegada por los Concejales actualmente, vemos con sorpresa que la mayoría de los proyectos son elevados por el Ejecutivo, de la mente de los ediles salen pocos, muy pocos proyectos de ordenanzas, también vemos pocas discusiones en el ámbito del Legislativo, lo que demuestra la poca preparación entre sus miembros, sobre todo los que entraron últimamente porque los oficialistas siempre fueron en bloque. Esto que exponemos debe ser un llamado de atención para las próximas elecciones: los partidos políticos tienen que elegir bien a sus representes, porque sino después se verá reflejado en el seno del Concejo. Ser edil no es para cualquiera, hace falta un conocimiento básico del funcionamiento de este Cuerpo Deliberante, que notamos falta en este concejo actualmente.