EL VIRUS DEL AUTORITARISMO

EL VIRUS DEL AUTORITARISMO

La presencia del Covid 19 ha generado en la sociedad innumerables dificultades. Algunas directas y otras indirectas cuyos resultados se verán cuando esta pandemia termine. Lo que preocupa es que esas conductas sigan reflejándose después de esta situación anormal. Como primera observación debemos ver que se ha afectado en forma ostensible la libertad física de los individuos. La implantación del aislamiento obligatorio en nuestros hogares, con rígidas prohibiciones al principio, y flexibilizando después, es una grave afectación a la libertad de ambular por el territorio de nuestro país. Si bien se encuentra la justificación en la aparición de la pandemia, y como único remedio se prescribe el aislamiento social, este antecedente en muy peligroso, nunca antes se había hecho en Argentina, salvo en la época de la dictadura militar. Coincidimos que el miedo al corona virus trajo aparejada esta violación a derechos esenciales del ser humano, hubo países como Suecia que no lesionaron ningún derecho individual, y sin embargo salieron adelante en su lucha contra el Covid 19. Partamos de la base que la mayoría de los países hicieron cuarentena y que excepcionalmente afectaron el derecho a la libertad, lo importante es que una vez que cese este estado de emergencia, todo vuelva a la normalidad. Aquí empiezan las dudas, porque esta cuarentena hizo salir de las personas el “autoritarismo” que llevamos oculto, o suprimido en nuestra mente. Al principio cuando la cuarentena era muy rígida, se instalaron controles policiales, de gendarmería, prefectura, etc. para que nadie circulara, y se labraron infinidad de infracciones al DNU de aislamiento obligatorio. Si bien luego se fueron flexibilizando, nada obsta que una vez finalizado el período pandémico las fuerzas de seguridad no se adjudiquen una parte de esa autoridad delegada extraordinariamente. Lo mismo podemos decir de las personas comunes, cuando no llevas bien el barbijo, o caminas por una zona donde no está permitido, pero sin causar ningún riesgo, aparece el “autoritario interior” de algún ciudadano que nos “reta” para que cumplamos con su cometido, en lugar de sugerir, nos ordena. Y ni que hablar de aquellos que opinan contra la cuarentena el medios de comunicación, corren el riesgo de ser sancionados socialmente, hubo casos que desde facebook suspendieron a ciudadanos locales que pusieron en duda la existencia del Covid 19. Esto es coartar la libertad de expresión, otro derecho individual, junto con el de circular, amparado fervientemente  en nuestra Constitución Nacional. En definitiva lo que queremos expresar es que la afectación de estos derechos individuales, fundamentales para el ser humano, amparados por nuestra constitución, no continúen afectados después que cese la pandemia, cuando se levante este estado de excepción. Es que los actuales gobernantes tienen antecedentes de ser sumamente autoritarios, y eso lo vivimos, pero en aquella oportunidad coexistían los tres poderes ejecutivo, legislativo y judicial, cosa que hoy no es así. Confiamos que después del levantamiento del aislamiento social obligatorio, no se continúe con alguna otra forma de limitación a las libertades, con la noble excusa de que hay que pagar la deuda externa por ejemplo. Por ahora en  la oposición política, se escucharon pocas voces hablando de este tema, debido a que el miedo, si el miedo al corona virus que la sociedad toda tiene, los crucificaría políticamente. Y hablando de “miedo”, utilizándolo de una forma u otra, los regímenes autoritarios asumieron con la anuencia de la sociedad. Viejo es el ejemplo de Rosas que asumió como gobernador de Buenos Aires por allá 1838 con la suma del poder público gracias al miedo que la sociedad tenía a la anarquía reinante en esa época. Más cerca los militares en 1975 cuando llegaron por el miedo a la anarquía sembrada por los grupos guerrilleros que combatían entre sí, sembrando el terror en la ciudadanía. Por eso cuidado con el miedo, no tengamos miedo de decir lo que pensamos, cuidemos nuestras libertades individuales, y defendamos la democracia con la división de poderes, es la únicas salida a este entuerto político a que estamos sometidos por las autoridades, y poner nuestro granito de arena para que el país logre salir de las dificultades sanitarias, económicas y políticas a que estamos siendo sometidos.