BIENVENIDA, PRIMAVERA

BIENVENIDA, PRIMAVERA

Coincidiendo con el inicio de la primavera, cada 21 de septiembre los estudiantes festejan su día; lo que suele ser desconocido es que el día del estudiante se festeja ese día, además de festejar el inicio primaveral, porque fue un 21 de septiembre el día en que fueron repatriados los restos de Sarmiento, que fue él mismo un gran estudiante.

En nuestro país, la fecha fue sugerida por el entonces estudiante Salvador Debenedetti, que con el tiempo se convertiría en un importante arqueólogo. En 1902, Debenedetti era el presidente del centro de estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, y en ese carácter sugirió a las autoridades la celebración, el 21 de septiembre, del día del estudiante.

La propuesta, en principio aceptada por la UBA, se fue extendiendo posteriormente a otros ámbitos educativos, y en la actualidad se celebra en todo el país. En esta jornada la juventud es protagonista con actividades de todo tipo, en su mayoría al aire libre como en complicidad con la estación que se inicia. Históricamente, a los estudiantes se les han dedicado numerosas poesías y canciones.

¿Cuándo comenzamos a disfrutar de esta fecha realmente? Desde siempre ha existido una discusión entre los científicos y astrónomos acerca del momento exacto en que comienza la primavera. Algunos dicen que es el 21 de septiembre, y otros aseguran que es dos días más tarde.

Lo cierto es que ya comenzamos la época de las flores, el calor, la vida al aire libre, el amor y, por supuesto, con todo esto también llegan algunas alergias. La verdad es que la primavera comienza en el hemisferio sur cuando se produce el equinoccio de otoño en el hemisferio norte, y finaliza el 20 de diciembre con el solsticio de verano, o de invierno en el hemisferio norte.

¿Cómo se produce este fenómeno? En el mes de septiembre la luz del Sol se proyecta sobre la Tierra de forma uniforme, es decir, los rayos del Sol alumbran de igual modo tanto al hemisferio sur como al hemisferio norte. Cuando esto sucede, se dice que la Tierra está en equinoccio; ese es el lugar de su órbita.

Así, al empezar la primavera, la duración del día es igual a la de la noche. En otras palabras, en el equinoccio los dos polos se encuentran a la misma distancia del Sol y los días tienen la misma duración que las noches. Esto ocurre sólo dos veces al año: entre el 20 y el 21 de marzo, cuando se da el equinoccio de primavera en el hemisferio norte, y entre el 21 y 23 de septiembre en el hemisferio sur. Se trata de los dos puntos en los que la elíptica corta el Ecuador celeste.

Salvador De Benedetti fue quien sugirió esta fecha para celebrar el día del estudiante. Sólo estas dos veces al año la duración del día es igual a la de la noche en todo el planeta. Tanto el día como la noche duran exactamente 12 horas. No se da un día exacto, ya que como la órbita de la Tierra alrededor del Sol no es igual todos los años, debido a que la traslación tarda más de un año -hay 5 horas, 48 minutos, 45,8 segundos adicionales cada año-, los equinoccios pueden variar en uno o dos días. Otro punto importante: los equinoccios son al mismo tiempo puntos de órbita de la Tierra e instantes precisos, no días, aunque se acostumbre a llamar equinoccios al día completo en que suceden esos instantes. La palabra “equinoccio” viene del latín “equi”, igual, y “nocte” noche. Se llama así porque la noche de ese día dura doce horas, igual que el día.

Los estudiantes de nuestra ciudad este año mudarán el pic-nic del Balneario Camping al predio de la Cámara de Comercio sobre Ruta 8. Una pena, porque es la única vez en el año que se disfruta en familia nuestro Balneario. Será cuestión de costos…..