“MALES OTOÑALES, O LARGOS O MORTALES.”
Otoño es un término que tiene su origen en el vocablo latino autumnus. El concepto permite nombrar a la estación que, de acuerdo a la astronomía, se inicia con el equinoccio otoñal y se extiende hasta el solsticio invernal. En el hemisferio sur, el otoño comienza el 21 de marzo y finaliza el 21 de junio, cuando empieza el invierno. El otoño se caracteriza por la caída de las hojas de aquellos árboles que forman parte del grupo de los caducifolios. Los árboles de este tipo, a diferencia de los perennes, renuevan sus hojas cada año. Con la llegada del otoño, por lo tanto, las hojas adquieren un color amarillento o amarronado y caen al suelo una vez que están secas. Una vez en el suelo se convierten en un problema porque en las veredas y calles de nuestra ciudad se acumulan, y los vecinos no saben qué hacer con ellas. Algunos esperan que el municipio se encargue de juntarlas porque para eso pagan sus impuestos pero esto es soñar despiertos, y la consecuencia es terrible si llueve porque seguro tapan las bocas de tormentas y la inundación de las calles es inevitable. Otros las juntan y hacen una parva que dejan por si el barrendero se las llevara, pero no existe tal personaje mitológico es una especie extinta en la tierra de Ostoich. Otros a la parva la prenden fuego provocando una humareda fenomenal, y los demás ciudadanos contentos, porque llevan olor a humo y los alérgicos al hospital. Entonces cual es la solución: juntar esas hojas secas y ponerlas en una bolsa de residuos gigante, si varios vecinos se juntan en la cuadra mejor. Pero no esperen que el municipio recoja la bolsa porque ese es otro tema. ¿Cuánto pagamos de ABL? ¿Más de $ 500 mensuales? Nos están metiendo la mano en el bolsillo, poco servicio para semejante suma, ¿Cómo fue que el Concejo Deliberante aprobó tales aumentos sin verificar si se estaba brindando los servicios? Mientras tanto bienvenido Otoño, que no tenés la culpa de tus acciones.